Un retrato del internado agrotécnico Las Delicias, donde los estudiantes de secundaria encuentran su camino en la vida. Las aventuras de los jóvenes protagonistas hablan por sí solas: el misterio del teléfono perdido, la suerte de un pichón encontrado y el resultado de un concurso para arrastrar una carretilla por el barro. Los pacientes maestros y otros miembros del personal maternal prestan atención durante las luchas diarias con las amistades, las peleas o las dolencias físicas. Cuídense, hagan té, hagan los deberes y todo irá bien. El único recordatorio del hogar viene con la llegada de un nuevo grupo de estudiantes, recibiendo el último gran abrazo de sus padres y secándose una lágrima.