El 12 de enero de 2011, en un piso del Paseo de Gracia, un grupo de amigos de Pepe Rubianes, que lo conocieron mejor que nadie y que se autodenominan "Las viudas de Rubianes", se encuentran (como acostumbran a hacer de vez en cuando) para cenar y recordar cómo era Pepe, su insólita personalidad, los buenos (y malos) momentos compartidos, las anécdotas, los rasgos que mejor definen al cómico más polémico e inclasificable de España. En definitiva, un retrato poliédrico, divertido, informal y emotivo de Pepe Rubianes.